La película El Supremo Manuscrito, una coproducción paraguaya, mexicana y argentina se estrenó el 24 de enero de 2020 en La Casa del Cine MX, un espacio reservado al cine de arte e independiente, en el corazón del centro histórico de la Ciudad de México.
El supremo manuscrito es una película de ficción que gira entorno a una supuesta desaparición del texto original de Yo el Supremo, de Augusto Roa Bastos, escritor y guionista paraguayo, obra inspirada en la vida del que fue dictador de Paraguay, José Gaspar Rodríguez de Francia, entre 1814 y 1840 y que fue le hizo vivir en el exilio político e incluso su trabajo fue prohibido en argentina por el dictador Argentino Jorge Rafael Videla y Roa.
En este thriller, los personajes se ven involucrados en situaciones de peligro para encontrar el manuscrito más valioso de la literatura paraguaya.
El film dirigido por Jorge Díaz de Bedoya y Michael Kovich Jr., cuenta con un elenco conformado por Fernando Abadie, quien interpreta al coleccionista Anton Remianiuk, también reúne a renombrados actores de la talla de Javier Enciso, Andrea Quattrocchi, Claudia Scavone, Katia Acosta, Sary López y Sandra Guillen.
El rector de la Facultad de Cine Izrael Moreno, comparte que para él fue un reto muy importante participar en esta producción tripartita entre Paraguay, México y Argentina, ya que consolidar equipos de trabajo de tres países, es una alternativa muy válida para crear mejores producciones a nivel latinoamérica y que los públicos de todos los países se sientan identificados con dicha producción.
Moreno asegura que el cine mexicano sigue despuntando con calidad y con altos estándares en nuestra región latinoamericana, por ello fue invitado como representante de nuestro país a participar y consolidar esta producción que tiene base en la leyenda fantástica de un libro, un manuscrito que dejó Augusto Roa Bastos a mediados de los años 70 y que se han urdido muchas historias alrededor de el.
“Es un thriller policiaco pero también psicológico y político, por lo que me sentí muy inspirado por el y participe con grandes baluartes del cine mexicano como Riccardo Dalmacci y otros artistas que se sumaron a este proyecto del Supremo Manuscrito” reiteró Izrael Moreno y reconoció también que la Facultad de Cine aportó muchos recursos técnicos para que su participación fuera contundente en el objetivo de consolidar un proyecto fílmico como ejemplo de trabajo en equipo y el acercamiento de un cine distribuido y co-producido internacionalmente para que sus alumnos y maestros tomen inspiración en sus trabajos de una cinta de alta calidad contado en nuestro idioma y reflejando la realidad histórica de muchos de los países de Latinoamérica.